Descripción
Esta lámpara es la encarnación del movimiento y la fluidez. Su diseño, inspirado en la ondulación suave de las olas, captura la esencia del mar en calma. Cuando está apagada, su textura minuciosamente detallada refleja la luz de forma sutil, invitando a tocarla y a admirar su complejidad. Pero es al encenderla cuando esta revela su verdadera magia: una cálida luminosidad que parece fluir de su núcleo, llenando el espacio con una energía serena y envolvente.
Cada curva está meticulosamente diseñada para dirigir la luz de manera armoniosa, creando un juego de sombras y resplandores que transforman cualquier habitación en un refugio de paz. Esta no es solo una lámpara, es un símbolo de equilibrio y movimiento constante, una pieza que invita a relajarse y dejarse llevar por la suave marea de su luz.
La lámpara negra es únicamente con fines decorativos (ilumina muy poco, aunque crea un efecto interesante). El foco provisto es blanco cálido, fácilmente reemplazable.